Informe sobre ectoplasma humano Biopolítica y ficción
DOI:
https://doi.org/10.35305/b.v5i09.261Palabras clave:
Biopolítica, Animalidad, Ectoplasma animal, Espectralidad, MaterialidadResumen
El laboratorio narrativo de Roque Larraquy y Diego Ontivero (2014) en Informe sobre Ectoplasma animal esboza un artefacto filosófico literario (a modo de crónica, bestiario, recetario, novela, efeméride enciclopédica, nomenclador, estructura de casos o diario de campo) que informa sobre la invención de una ciencia imaginaria como así también sobre la circulación de un amalgamado discurso positivista-espiritista. La narrativa histórica en diálogo con la literatura científica (en un anclaje histórico-político tan preciso como disimulado) constituye uno de los motivos centrales que anudan el Informe (2014). La operación que nos interesa subrayar gira en torno al objeto de estudio de aquella pseudociencia fallida, esto es, el carácter animal de los espectros y las apariciones fantasmales en un umbral que desdibuja lo vivo de lo muerto. Lo que sale a la luz en la escritura de Larraquy es la dimensión animal del registro fantasmal (la fotografía ectoplasmatica o ectografía animal) que cruza y tensa las fronteras corporales entre lo humano y lo animal, entre ciencia y vida y -dentro de un registro historiográfico más amplioentre ciencia nacional, Estado y violencia. Se trata de repensar el modo en que la cultura elabora, piensa y construye un artefacto (como espacio de figuración, exploración crítica e interrogación estética) que responde a un horizonte histórico definido por la biopolítica.